viernes, 26 de septiembre de 2008

En la Era de la Ciencia....

El hecho de haber nacido en la era de la ciencia ha hecho de los jóvenes las principales víctimas del excitante avance tecnológico

Desde hace algunos años,Internet y la telefonía móvil se han transformado en la “ciencia amiga”, pero su mal uso es la causa de algunas de las denominadas adicciones psicológicas.
Las nuevas formas de comunicación han aparecido en la vida de los seres humanos como una salvación, pero también se han convertido en un infierno para quienes no pueden prescindir de su uso compulsivo.

Por ejemplo, desde hace algunos años, Internet y la telefonía móvil se han transformado en la “ciencia amiga”, pero su mal uso es la causa de algunas de las denominadas adicciones psicológicas.
Porque la necesidad de enviar continuamente mensajes de texto, hacer llamadas telefónicas o conectarse a la red de forma compulsiva, representan el día a día de quienes padecen estos nuevos trastornos que, en muchas ocasiones, vienen acompañados con una alta tendencia hacia la depresión, la ansiedad o cualquier otro tipo de psicopatía.
Atentos papas estos son algunos Síntomas
Cambios de carácter, problemas de rendimiento, sobre todo la falta de sueño, renunciar a determinadas actividades de la vida cotidiana, son síntomas claros de que se empieza a padecer algún tipo de adicción que nos impide seguir con nuestra rutina habitual, un perfil que aparece más que en ningún otro, en personas amantes de la aventura y que no soportan el aburrimiento.

¿Una puerta al mundo?
El ciberespacio se presenta como una puerta que muestra una realidad diferente a la nuestra.
Un nuevo mundo que permite hablar con una persona que está en la China como si estuviese en la habitación de al lado o enviarle un documento para que en un instante pueda trabajar con él.
Pero no todo es color rosa. Empiezan a surgir casos de personas que no saben utilizar la red.
Esta dependencia provoca la necesidad de estar siempre `on line`.
Por eso, podría decirse que los chats y los foros de discusión son las partes más peligrosas de este magnífico entramado que también tiene su lado oscuro.
Más de cerca
“Cuando ve que no le va bien conectarse y a pesar de ello sigue haciéndolo, sacrificando su vida social, ya puede considerar que padece una adicción a la red”
También se sabe que la soledad de la noche es el paraíso de los afectados, porque es el mejor momento para navegar sin presiones y sin el miedo de que alguien pueda inmiscuirse en la actividad que realizan.
Por eso, el adicto acaba por descubrirse cuando es incapaz de llevar a cabo sus tareas habituales debido al cansancio.
Estos enfermos como todos los que sufren determinadas dependencias, están mucho tiempo en la fase de negación.
De aquí que sea la familia la que debe ocuparse del que sufre este tipo de patologías y lo motive a buscar ayuda y asistir a sesiones psicoterapéuticas.
También peligroso
Debido a que el ingreso a Internet es algo más limitado y muchos grupos sociales todavía no tienen conexión desde casa, en los últimos cinco años los celulares han proliferado de manera exagerada.
La necesidad del uso de estos aparatos aumenta en todos los sectores sociales y entre los distintos grupos de edad, siendo más jóvenes sus principales víctimas.
Por lo general, se trata de adolescentes que no tienen un alto nivel adquisitivo y que, a través de los mensajes, consiguen decir todo lo que quieran.
Indica que la adolescencia es una etapa muy importante para la formación definitiva de la persona adulta.
En este sentido las relaciones sociales son algo muy importante para ese proceso y de forma errónea se cree que el celular es un buen recurso para relacionarse con los amigos.

¿Qué hacer papás?

En este tipo de dependencias la terapia es lo único que puede ayudar a los pacientes.
En los casos de adictos a la red, hay que evitar que el afectado se conecte fuera de las horas de trabajo.
Para ello se marca una cantidad de horas determinada, con alguien que controla qué páginas visita.
También es vital hacer un control económico para evitar que se pueda acceder a Internet desde un cibercafé.
Respecto de la mejor manera de solucionar una adicción al teléfono, hay que prohibir su uso hasta que se aprenda a utilizar de nuevo.
Se debe reeducar al paciente, aunque las recaídas sean algo muy usual, ya que es similar a lo que les pasa a los adictos al sexo, que no lo pueden eliminar por completo de su vida y por eso les cuesta diferenciar el comportamiento que se puede considerar normal de la adicción.
Aunque estas terapias no tienen una duración fija, por lo general, en un año se puede considerar como finalizado el proceso de curación.
No obstante, la familia, los amigos y el autoconvencimiento son tres pilares clave para que el paciente salga del abismo del trastorno adictivo y pueda volver a su rutina habitual. -EFE
Todo un proceso
Los adelantos en comunicación no deben ser considerados demoníacos, pero hay que saber sacarles el máximo provecho sin que ocasionen problemas.
El defecto no está en ellos sino en el uso que se les dé.
Hay que educarse para utilizar los aparatos sin que luego no se sufran repercusiones de salud ni de tipo económico.



Desde hace algunos años, Internet y la telefonía móvil se han transformado en la “ciencia amiga”, pero su mal uso es la causa de algunas de las denominadas adicciones psicológicas.
les aconsejamos que visiten esta pagina y vean el vídeo del niño loco alemán que es un fiel reflejo de la realidad.

1 comentario:

Anónimo dijo...

ES MAS QUE INTERESANTE ESTA INFORMACION YA QUE DEJA ENTREVER A LOS ADOLESCENTES LAS DISTINTAS PRECAUSIONES QUE DEBEMOS TENES, Y MARCAR LA DIFERENCIA ENTRE USO Y ABUSO